Según lo dieron a conocer medios regionales y nacionales es la segunda vez que la ESE Hospital San Jerónimo de Montería es intervenida debido al déficit financiero (supera los 50 mil millones de pesos), condiciones sanitarias inferiores a los estándares y deficiencias en la prestación del servicio.
El superintendente, Fabio Aristizábal Ángel, en declaraciones a la prensa local afirmó que la decisión se tomó luego de conocer los informes de la interventoría en los que se evidenciaron varias irregularidades como el aumento de los pasivos, procesos que comprometían la seguridad de los pacientes y de los trabajadores, falta de señalización, entre otros.